Las enfermedades no transmisibles (ENT) representan una enorme carga para las personas, los sistemas de salud y las economías de los países, por lo que la búsqueda de opciones terapéuticas innovadoras para diabetes, cáncer y enfermedades cardiovasculares, entre otras, se vuelve crucial. Sin embargo, la innovación también pasa por hacer que los beneficios de los tratamientos más innovadores lleguen a todas las personas que los necesitan y ese es, quizá, el desafío más grande al que se enfrentan los encargados de formular políticas de salud a nivel mundial.
En este texto, FORESIGHT Global Health reúne las visiones de expertos en salud mundial sobre cómo es el futuro de los medicamentos para las ENT y qué innovaciones podemos esperar.
Para Mike Fraser, director general de Novartis Gene Therapies para Europa, Oriente Medio y África, las terapias génicas para ENT cambiarán la forma en la que se abordan el cáncer o la diabetes, pues se apuntarán los esfuerzos a las causas subyacentes de las enfermedades: “Puedo imaginar un momento en el que la gente no tendrá que tomar píldoras diarias durante un período prolongado, ya que podremos tratar la raíz del problema”.
Por su parte, Ali Stunt, sobreviviente de cáncer de páncreas y director ejecutivo y fundador de Pancreatic Cancer Action, considera que las pruebas genómicas de los tumores cancerosos cambiarán las reglas del juego y permitirán ampliar las opciones de tratamiento, siempre y cuando los sistemas de salud tengan la capacidad de ofrecerlas de manera rutinaria.
La legislación también juega un papel decisivo cuando hablamos de acceso. Ricardo Baptista Leite, médico, diputado portugués y jefe de salud pública de la Universidad Católica de Portugal, en Lisboa, considera necesario encontrar un nuevo modelo de financiamiento sostenible que permita llegar a la meta de cobertura universal de salud, al tiempo que se destinan recursos específicos para innovación.
Del lado de la industria farmacéutica, Vanessa Peberdy, directora asociada de política de salud global de la Federación Internacional de Asociaciones y Fabricantes de Productos Farmacéuticos (IFPMA), ve un futuro promisorio en áreas terapéuticas como el cáncer y las enfermedades cardiovasculares, utilizando enfoques como la inmunoterapia o la terapia con células CAR-T.
Al mismo tiempo destaca que si bien, “la innovación biofarmacéutica está detrás de algunos de los mayores logros de la medicina moderna, desafortunadamente no todas las comunidades se han beneficiado de los avances médicos. Abordar las razones de esto es un desafío complejo que requiere un compromiso a largo plazo de los gobiernos, la sociedad y el sector privado”.
Aún nos encontramos en medio de una emergencia de salud mundial a causa de la covid-19, donde se exacerbaron las brechas de atención para las personas que viven con alguna enfermedad no transmisible. Y esta misma situación también nos ha dejado valiosas lecciones de colaboración y solidaridad para avanzar hacia un mismo objetivo, que es la salud y el bienestar de todas y todos.
No ignoremos esas lecciones y sigamos el camino de la innovación.
