Skip to main content
search

Panelistas:

  • Cecilia D’Antuono – Directora Asociada de Investigación Clínica para Sudamérica de Bristol Myers Squibb
  • Abraham Israel Villarreal Castellanos – Coordinador de Ensayos Clínicos de COFEPRIS

Moderador:

  • Fernando Fon, Director de Asuntos Médicos y Regulatorios de la AMIIF

Abraham Israel Villarreal Castellanos – Coordinador de Ensayos Clínicos de COFEPRIS

  • En el área de Ensayos Clínicos de COFEPRIS manejamos diferentes homoclaves. La 410 para ensayos clínicos nuevos contiene varias modalidades. Dentro de éstas tenemos la modalidad A que corresponde a los estudios de fases de medicamentos biológicos y biotecnológicos. 
  • La modalidad B está enfocada en la parte de estudios de bioequivalencia y en la modalidad C evaluamos todos los dispositivos médicos. Por último, en la modalidad D evaluamos los ensayos clínicos de tipo observacional.  
  • A partir de 2018, hemos tenido un aumento en el ingreso de solicitudes de ensayos clínicos de fases, que incluyen a medicamentos, biotecnológicos, biológicos, terapias, con el ingreso de 200 o 250 protocolos aproximadamente.
  • Esta tendencia se ha ido incrementando. Al 2022 teníamos casi 300 protocolos sometidos ante COFEPRIS, lo que indica que la investigación en México ha crecido. La industria ha visto a México como un país donde se puede desarrollar investigación clínica. Esto es positivo porque al final trae un beneficio para la población.  
  • Respecto a los estudios de bioequivalencia, hemos notado una tendencia contraria. En el 2018 se habían ingresado alrededor de 600 trámites. En el 2022 se ingresaron alrededor de 427 trámites. Entre las razones pudo haber estado la pandemia.
  • En el caso de dispositivos médicos, la cantidad de solicitudes que tenemos no es muy alta, son alrededor de 18 o 20, pero la tendencia es de crecimiento.
  • En cuanto a estudios observacionales, ingresan entre 20 y 30 protocolos al año aproximadamente.
  • En el sometimiento de estudios correspondientes a la modalidad A, hemos visto una tendencia a aumentar en los estudios de fase 1, aunque no en gran cantidad, a través de los años.
  • En 2018 teníamos sometidos aproximadamente 9 protocolos de fase 1. Actualmente en 2022 – 2023 se han sometido ya 19 protocolos de fase 1. Este tipo de estudios han estado creciendo en México.
  • Con los estudios de fase 2 pasa lo mismo. La mayoría de los protocolos que ingresan corresponden a estudios de fase 3. Se han ido incrementando e ingresan por año entre 130 y 140 protocolos. 
  • En el caso de estudios de fase 4, la tendencia es baja. En 2019 se sometieron 4 protocolos; en el 2021 fueron 14 y en el 2022 fueron 4. 
  • En el caso de los nuevos diseños, donde se pueden incluir estudios adaptativos y protocolos maestros, la tendencia ha sido de aumento a partir de 2018. Empezamos con 7 protocolos y actualmente estamos con 20 o 30 protocolos, que incluyen estudios de fase 1, 2, 3 y 4.
  • En cuanto a las áreas terapéuticas, tenemos un poco más estudios del área oncológica. Y en cuestión de estudios de infectología, endocrinología, reumatología, neumología y gastroenterología, la tendencia se mantiene lineal.
  • Cuando llegó la pandemia esto empezó a cambiar y para 2020, los estudios oncológicos se mantuvieron con 38 protocolos aproximadamente. 
  • Se vio un aumento de protocolos en el caso de los estudios del área de infectología. En 2018 teníamos 15, en 2019 teníamos 15 y para el 2020 ya teníamos 107 protocolos, todos estos relacionados con el área de covid-19.  En 2021 manejamos 76 protocolos y la cifra ha ido bajando, considerando el paso de la pandemia y que el brote ya no es tan grande como antes. 
  • En el 2020 y 2021, los estudios en el área de infectología se enfocaron más en infecto – neumología y los otros estudios se detuvieron por el resguardo que todos tuvimos en la pandemia. 
  • En cuanto a tipo de productos en investigación, ha habido una tendencia a aumentar. La mayoría de los estudios que nos presentan son de farma – químicos, pero hemos visto una tendencia de aumento en el caso de los productos biotecnológicos. 
  • Celebramos el trabajo de colaboración y cercanía que nuestra agencia sanitaria Cofepris está haciendo con la FDA, Health Canada y otras instancias en el ámbito internacional para dialogar entre agencias. 
  • Se creó una unidad modelo en COFEPRIS que tiene como objetivo hacer una reestructuración del área de ensayos clínicos. Esto llevó a un incremento en la plantilla del personal que evalúa este tipo de ensayos, propiciando una mejor organización y distribución de trabajo, y esto nos ha permitido tener una disminución en los tiempos de evaluación. 
  • Asimismo, se está integrando personal de servicio social que realiza actividades de tipo administrativo, que realizaban los dictaminadores. Esto agiliza los tiempos de evaluación técnica.
  • Al interior hemos tenido una mayor interacción y retroalimentación entre áreas, lo que nos ha permitido fortalecer la evaluación y el seguimiento de este tipo de ensayos clínicos. 
  • Las nuevas tecnologías que vienen de la pandemia, como monitoreos o diarios electrónicos, son un reto para todas las autoridades regulatorias, en el sentido de tener la certeza de que esa información se maneje con la confidencialidad y protección adecuada, considerando que son datos sensibles. 
  • Actualmente ha habido más generación de información; se ha observado un aumento en los medios electrónicos con los que el paciente puede registrar parte de su seguimiento, a través del celular o tabletas electrónicas.
  • También a raíz del covid-19 se incrementó el uso de telemedicina, que llegó para quedarse. Regulatoriamente tenemos que abarcarlo, para tener certeza en cuestiones de seguridad.
  • Con relación a esto, tenemos un proyecto de digitalización; el área de ensayos clínicos va a ser la pionera en esta implementación, que es diferente a la que se lleva a cabo en la plataforma digital para trámites y servicios DIGIPRiS. Vamos a iniciar pruebas, esperando que en un corto plazo se pueda integrar en el proceso de sometimiento de protocolos de investigación.
  • Hemos buscado exhaustivamente a un desarrollador de la plataforma que nos permita mantener la confidencialidad de la información que se va a manejar de manera electrónica.  También queremos que sea una plataforma amigable, para que el usuario pueda ingresar y realizar su trámite. 
  • Tenemos el reto de lograr un proceso acelerado y lograr que el usuario ya no tenga que venir personalmente; esto agilizaría notablemente los tiempos de sometimiento y de evaluación, para dar respuestas más oportunas. 
  • Otra cosa que queremos hacer para mejorar estos procesos, en el caso de las enmiendas, es una reorganización de la homoclave que es la 9-12X, con el objetivo de poder identificar aquellos trámites que por sus características permiten una evaluación más rápida, para agilizar el proceso.
  • Estamos buscando también la modernización de nuestra plataforma de ensayos clínicos, para que también permita un mejor acceso y búsqueda de información, y sea amigable para el usuario. 
  • Estamos tratando de modificar la parte de regulación, porque este tipo de ensayos y productos tienen características diferentes. De hecho, también lo estamos manejando con otras áreas, porque no solamente está la parte del estudio, sino también el centro donde se va a llevar a cabo, para asegurar que cuente con la infraestructura y la certificación para poder realizar ese tipo de ensayos.
  • Al interior estamos trabajando con áreas como servicios de salud; estamos tratando de adaptar y mejorar la regulación que tenemos para dar una mejor evaluación y soporte para que se puedan realizar estos estudios, considerando desde licencias sanitarias. 
  • Estamos manejando retroalimentación al interior. Al tratarse de terapias avanzadas, también se hacen evaluaciones por parte del Comité de Moléculas Nuevas, para que den su opinión y eso está ayudando a la evaluación de este tipo de productos.
  • Es importante tratar de cambiar la regulación en este sentido. También pretendemos manejar ciertas guías específicas. Otra parte que nos permite la regulación nacional es poder adoptar regulación internacional para la evaluación de este tipo de productos.  

Cecilia D’Antuono – Directora Asociada de Investigación Clínica para Sudamérica de Bristol Myers Squibb

  • La pandemia fue para nosotros una catapulta para nuevas prácticas. En marzo de 2020 aparecieron nuevas guías y lineamientos que autoridades sanitarias dieron para poder continuar con los ensayos clínicos que teníamos en curso. 
  • Para cuidar la seguridad de los pacientes y dar continuidad a los estudios, tuvimos que implementar prácticas como la administración de la medicación en domicilio, algunas visitas remotas con telemedicina, informes de consentimiento electrónicos, monitoreo remoto.
  • Empezamos a desarrollar centros cercanos a los pacientes, para que les aplicaran infusiones de medicación, y así evitar que se trasladaran a centros lejanos.
  • A través de centros en unidades móviles, se acudió a los domicilios de los pacientes para darles servicio de enfermería y tomado de muestras. 
  • Estas prácticas, que iniciaron con la pandemia, continuarán posteriormente como prácticas descentralizadas de importancia dentro de los ensayos clínicos, sobre todo con los pacientes que viven en lugares lejanos. 
  • Los centros descentralizados tienen una razón de ser para ciertas patologías. Es la tendencia que hoy se está discutiendo con autoridades sanitarias, para la generación de normativas. 
  • En diciembre del año pasado se publicó una disposición de la Unión Europea para que, tanto comités de ética como agencias, puedan evaluar estas prácticas descentralizadas, que consisten en visitas remotas para hacer exámenes físicos o para dar alguna facilidad de salud, con las respectivas certificaciones. Todo lo que tenga que ver con la distribución del producto en investigación a domicilio del paciente.
  • Esto será factible dependiendo de las normativas locales respecto al envío de la medicación y las condiciones requeridas para su conservación durante su traslado o retiro.
  • Las tecnologías digitales de salud son instrumentos que ayudan a hacer ciertas mediciones en el paciente de forma continua, como toma de presión, medición de frecuencia cardiaca, ciertas habilidades en las personas con mal de Parkinson.
  • Todas estas tecnologías digitales de salud están hoy dentro del ojo de los reguladores.
  • Las tecnologías digitales de salud facilitan la generación de datos continuos, por ejemplo, cuando un paciente va al centro de investigación, de acuerdo con el protocolo se le puede tomar la presión. La tecnología digital permite un monitoreo mayor de los efectos del medicamento en el paciente y puede detectar eventos esporádicos como arritmias o convulsiones, lo que es más difícil captar en la visita clínica.
  • La tecnología brinda resultados de mediciones en el mundo real, en el trabajo, la escuela, y muestra el dato clínico obtenido en la vida diaria del paciente. Ayuda a cuantificar la gravedad de la enfermedad y a evaluar el estado funcional del paciente. Gracias a esta gran cantidad de datos, identifica efectos poco frecuentes; da acceso en tiempo real a los datos, permite ver los efectos de las dosis y visualizar la respuesta durante el intervalo de dosificación. 
  • Para estos procesos, los instrumentos de medición deben estar validados, de modo que las mediciones sean exactas y precisas. Por ello se hace la calibración y verificación del equipo. También la validación implica ser exacta, precisa, reproducible y robusta. Y esa robustez tiene que ver con la validación en campo. Ello quiere decir que el instrumento de medición lo va a tener y operar el paciente, por lo que es importante que los datos que arroja el instrumento sean los mismos cuando mide el médico y cuando el paciente realiza la medición en su casa.
  • Por otro lado, es muy importante la validación y justificación del criterio de valoración clínica. También se evalúa si el instrumento se adapta a la vida del paciente, si es fácil de operar o no, o si es molesto, cuánto dura la batería y la sincronización de datos.
  • Cuando se usan tecnologías digitales de medición remota, se debe definir claramente qué se está midiendo, cuál es la ventana de tiempo de la observación, y cuál es la fórmula para la respuesta en cada paciente. 
  • Estamos tratando de modificar la parte de regulación, porque este tipo de ensayos y productos tienen características diferentes. De hecho, también lo estamos manejando con otras áreas, porque no solamente está la parte del estudio, sino también el centro donde se va a llevar a cabo, para asegurar que cuente con la infraestructura y la certificación para poder realizar ese tipo de ensayos.
  • Al interior estamos trabajando con áreas como servicios de salud; estamos tratando de adaptar y mejorar la regulación que tenemos para dar una mejor evaluación y soporte para que se puedan realizar estos estudios, considerando desde licencias sanitarias. 
  • Estamos manejando retroalimentación al interior. Al tratarse de terapias avanzadas, también se hacen evaluaciones por parte del Comité de Moléculas Nuevas, para que den su opinión y eso está ayudando a la evaluación de este tipo de productos.
  • Es importante tratar de cambiar la regulación en este sentido. También pretendemos manejar ciertas guías específicas. Otra parte que nos permite la regulación nacional es poder adoptar regulación internacional para la evaluación de este tipo de productos. 
Close Menu