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Liberando el potencial del sector de innovación en salud rumbo a la recuperación post COVID-19

Ponentes:

  • Arturo de la Rosa. Director General, Abbvie México
  • Andrés Gravenhorst. Director General para México. Johnson & Johnson
  • Agustín Zabulanes. Director para México, Boston Scientific
  • Sara Montero. Directora General para México, Latinoamérica y los Países Andinos de Lundbeck
  • Carlos Annes, director general de MSD en México

Modera: Solange Márquez. Consultora internacional.

Arturo de la Rosa. Director General, Abbvie México

  • La innovación ha reducido los tiempos de diagnóstico de enfermedades difíciles de tratar y ha mejorado la calidad de vida de los pacientes.
  • La innovación en salud es mucho más que medicinas nuevas. No hemos modificado el modelo de atención en salud para que esté en línea con las nuevas necesidades.
  • La mortalidad por enfermedades crónico-degenerativas requieren más que un diagnóstico y de una prescripción correcta. De hecho, más de la mitad del resultado está en manos del paciente.
  • La innovación es la solución para moverse hacia adelante, mientras más vacunas contra la COVID-19 haya y se lleven a la población, más rápido se recuperará la economía mexicana.
  • La clave es cómo nos anticipamos para que la población se mantenga sana. La combinación entre una población sana y una buena economía es lo que nos llevará al bienestar que tanto anhelamos.
  • Tiene que haber una innovación colaborativa entre sectores distintos del sistema de salud. Acabamos de pasar de una Cofepris cerrada, a una Cofepris abierta donde pone a todos en la mesa y ese es el modelo a adoptar.
  • Tenemos que hacer que la innovación tenga un enfoque inclusivo para cerrar la brecha de desigualdad en el sistema de salud.
  • La pandemia es un punto de quiebre que acelerará los emprendimientos para lograr mejores resultados en salud. Y eso será un gran legado de esta situación.

Andrés Gravenhorst. Director General para México. Johnson & Johnson

  • Tendencias en la salud digital acrecentadas por la pandemia: la atención domiciliaria y virtual, la mejora del diagnóstico vía inteligencia artificial, y las instalaciones ambulatorias surgirán como parte de una red altamente interconectada, centrada en el problema del paciente y no en las especialidades.
  • Una innovación en el futuro de la salud son las alianzas de los sectores de salud público-privado para que los pacientes del sector público puedan acceder a la infraestructura del sector privado. En México ya se han visto algunos casos.
  • No hay que ver a las compañías como competidoras, sino con un aspecto mucho más amplio de colaboración, que nos lleve a hablar entre todas de cómo enfrentar ellos los problemas. Un ejemplo es la alianza de J&J y Merck en Estados Unidos para fabricar una vacuna antiCovid.
  • La nueva era digital simplificará mucho los procesos, impulsará la eficiencia, tirará barreras entre empresas o instituciones que tiene fines comunes para un objetivo mayor. Además, esta nueva era hará que los tratamientos de cirugías serán más seguros en el futuro.
  • Los responsables de las políticas públicas y los ejecutivos de la industria de la salud deben catalizar y acelerar esos cambios que sirvan como impulsadores de una agenda de innovación.
  • El sector se ha visto gravemente afectado por la pandemia, y más que nada por los pacientes de no concurrir a los hospitales, como sí las regulaciones en algunas geografías limitando las urgencias a la COVID y no necesariamente a la atención del paciente, por lo cual hay que desarrollar nuevos modelos financieros para que sea sostenible en el tiempo.
  • Más allá de la inversión, que en México es relativamente baja respecto al PIB, se requiere atención hacia el futuro.
  • Hay que adoptar modelos de cuidado de valor. Hay un deterioro de los márgenes de invertir y si nosotros no reinventamos esta ecuación es difícil que sea sostenible en el tiempo. Lamentablemente las instituciones y los sistemas están enfocados en el costo a corto plazo y no le dan valor al largo plazo del continuo del cuidado del paciente.
  • Todos los avances de innovación y en materiales de eliminación como barreras de cadenas de suministro, implementaciones de tecnología para apoyar a los pacientes o la digitalización son aspectos que mejorarán la innovación y la eficiencia, por lo tanto, tendrán un impacto directo en la economía de México.

Agustín Zabulanes. Director para México, Boston Scientific

  • México ocupa el octavo lugar como exportador de dispositivos médicos
  • México debe invertir más en la prevención y hay empresas que están invirtiendo en el desarrollo de tecnologías que dan valor en cuanto a la efectividad y mejoran el costo total del paciente para el sistema de salud.
  • Debemos evolucionar a modelos de riesgos compartidos, basados en resultados, y teniendo productos como servicios, factores que ayudarán a la recuperación de la economía y del sistema de salud.
  • En un año, la tecnología en el sector biofarmacéutico ha demostrado que le ha ganado la batalla a la pandemia.
  • Con la pandemia se ha acelerado la implementación de sistemas integrados y manejo de información de registros médicos, lo que puede encaminarnos hacia una medicina más preventiva y prescriptiva.
  • Además de contar vacunas COVID, se requiere un sistema eficiente de la cadena de suministro, de la cadena de suministro y orquestar todo el acceso en la última milla.
  • El gran desafío de hoy es cómo tratamos de manera más preventiva, más proactiva y anticipada muchas enfermedades que no han cesado, como las no transmisibles.

Sara Montero. Directora General para México, Latinoamérica y los Países Andinos de Lundbeck

  • Hay unos 700 millones de personas con enfermedades mentales en el mundo, es decir, el 13% del total de las enfermedades.
  • En México es peor el problema porque es mayor el estigma y menor la detección. Antes de la Covid, el 18% de las personas en edad productiva entre 15 y 64 años en México sufría un trastorno como la depresión, la ansiedad, demencia o la fobia.
  • Pasan hasta 15 años antes de que se diagnostique una enfermedad mental, lo que puede desencadenar otras enfermedades.
  • La depresión es la primera discapacidad en mujeres mexicanas y la novena para hombres.
  • La pandemia ha provocado una crisis en salud mental que no se había visto antes y las necesidades de atención son cada vez mayores.
  • La Covid está llevando a un aislamiento físico, que aumenta los niveles de soledad, de depresión y del consumo nocivo de sustancias.
  • En México se invierte el 2% en salud mental, cuando en otros países se invierte el 5 o 6%.
  • La principal causa de mujeres que presentan de depresión en un 32% está relacionado con violencia de género.
  • En 2021 está programado en México un gasto de 2.1% del presupuesto público en salud mental, lo que significa un 9.6% menos de lo que se invirtió en 2013, y 0.1% menos que en 2020.

La atención de salud mental requiere una perspectiva de género, ya que las mujeres son más propensas a padecer depresión y ansiedad. Además, se mejora la distribución de recursos hacia telemedicina, innovaciones y nuevos fármacos.

  • En México se tienen problemas de acceso a medicamentos innovadores.
  • En el sitio latam.progress.im/es hay información de profesiones sobre salud metal que es de mucha ayuda para pacientes, comunidad médica, para políticos y profesionales sanitarios. Es información de valor que no tiene nada qué ver con productos.
  • La empresa invierte el 20% de sus ingresos globales en investigación y desarrollo. La fundación da becas científicas con más de 75 mdd en investigación biomédica enfocada en salud cerebral.

Carlos Annes, director general de MSD en México

  • La pandemia ha sido un catalizador de la innovación. Nos ha obligado a innovar, a reinventarnos y a cambiar la manera la manera de operar.
  • Lo más importante es que los descubrimientos que todas las compañías hagan sean accesibles a nivel mundial, considerando las diferentes geografías y situaciones socioeconómicas.
  • La pandemia seguirá requiriendo del ecosistema público y privado los mayores niveles de diálogo, y de colaboración.
  • Unos resultados con verdadero impacto sanitario, con acceso equitativo a las nuevas tecnologías, más allá del nivel de desarrollo de cada país, dependen de todos los sectores.
  • La pandemia ha revalorizado el rol esencial de MSD y el de la industria biofarmacéutica, en abordar los grandes retos de salud, y a la vez rescata la importancia que tiene contar con un ecosistema de salud que incentive la toma de riesgos y la innovación.
  • El conocimiento científico y médico son los que ayudarán a salir de la pandemia y por eso se debe seguir confiando e invirtiendo en descubrimientos científicos.
  • En México hay muchas oportunidades para llevar el ecosistema de innovaciones a otro nivel.
  • A nivel mundial la inversión biofarmacéutica oscila en los 200 billones de dólares anuales. Los diferentes actores en México debemos propiciar que el ecosistema sea más eficiente y equitativo, y que se asegure el acceso a la innovación y su financiamiento para atraer más inversión.
  • Se debe aposta por políticas públicas que perduren en el tiempo, que atraigan inversión, incrementen el empleo y pongan a los pacientes en el centro.

Links de interés:

AMIIF. Siete grandes proyectos de colaboración internacional para enfrentar la COVID-19.

AMIIF. #AMIIFLab Alianzas innovadoras para poner fin a la pandemia de COVID-19.

 

 

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