No hay mejor representante del dicho una imagen vale más que mil palabras que un emoji. ¿Has pensado qué tanto los usas para comunicarte con tus amigos, familiares o compañeros de trabajo? Estos dibujos o pictogramas se consideran una gran herramienta para romper las barreras del idioma y así, llevar la comunicación en redes sociales a otro nivel.
Hoy en día contamos con ejemplos muy valiosos de lo que un emoji puede hacer para mejorar la comunicación, la concientización y la lucha en diversas áreas de la salud pública.
Uno de ellos es el emoji del mosquito, que apareció en nuestros teléfonos en 2018 tras la propuesta que lanzó el Centro Johns Hopkins para Programas de Comunicación y la Fundación Bill y Melinda Gates para contar con un emoji del animal más letal del mundo debido a que propaga enfermedades como la malaria, el Zika o el dengue, responsables de millones de muertes cada año.
Otro caso es el emoji de la gota de sangre, que llegó a nuestros teclados tras la campaña impulsada por Plan International UK para combatir la vergüenza y el estigma que rodea a millones de mujeres durante su periodo menstrual. Si bien la gota no era la propuesta original (ropa interior, una toalla sanitaria, un calendario mensual, gotas de sangre menstruales y un útero estaban entre los diseños propuestos), sí representa un paso adelante para abrir la conversación sobre el tema.
Por otro lado, investigadores de la Clínica de Mayo llevan a cabo estudios para conocer el impacto que puede tener el uso de emojis durante el tratamiento de pacientes diagnosticados con cáncer. Echando mano de las caras sonrientes o de fruncir el ceño, los investigadores buscan nuevas opciones para que los pacientes expresen su estado de ánimo y puedan mejorar la atención dentro y fuera del hospital.
Y durante estos tiempos de pandemia las propuestas no cesaron. Apple planteó cambiar el emoji de jeringa con sangre que gotea y en su lugar, tener una jeringa vacía para abrir el diálogo sobre las vacunas covid-19. Por su parte, la OMS usó muchos emojis que ya existen para promover el uso del cubrebocas, la sana distancia y el lavado de manos como estrategias adicionales para combatir la emergencia de salud.
El Día Mundial del Emoji, que se celebra el 17 de julio, es un buen momento para usar nuestro emoji favorito y para reflexionar sobre el potencial que tienen estos pictogramas para avanzar hacia un mundo más justo, saludable y equitativo. ¿Qué emoji nuevo propondrían al Consorcio Unicode para integrarlo a nuestros teclados?
