Fenómenos como el envejecimiento de las poblaciones, el aumento de las enfermedades crónicas no transmisibles y de manera reciente, la covid-19, han hecho que la necesidad de cuidados informales en casa crezca.
Las personas cuidadoras son aquellas que asumen la responsabilidad total del paciente ayudándole a realizar todas las actividades que no puede llevar a cabo. Generalmente es un miembro de la familia, un amigo e incluso un vecino, y no recibe remuneración económica ni capacitación previa.
Muchas veces, quienes prestan estos cuidados informales en el domicilio son mujeres de mediana edad, lo que choca con el cambio cultural en su rol social y su necesidad de incorporarse al mundo laboral retribuido. En México, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) del Instituto Nacional de Estadística y Geografía, en 2016 había aproximadamente 286 mil ocupados en el cuidado de personas dependientes en México, y 97 de cada 100 personas que lo ejercen son mujeres.
En este contexto es pertinente preguntarse, ¿Quién cuida al cuidador(a)? Y es en este sentido que María Jesús Rojas, doctora y profesora de envejecimiento y calidad de vida, señala que para dotar de los recursos necesarios a quienes cuidan, es preciso facilitarles información, formación, asesoramiento sobre la enfermedad, síntomas comunes, síntomas graves, cuándo consultar al profesional de salud y recursos de apoyo.
Cuidar a las personas cuidadoras debería convertirse en una prioridad para el ámbito de salud, el social y el económico. No hacerlo nos pone en riesgo de ampliar las brechas de cuidado, de equidad, de protección social y de trabajo decente.
Aquí unos datos de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) para reflexionar:
- En 2015 había 2,100 millones de personas que necesitaban cuidados (incluidos niños, personas de edad avanzada o con discapacidad grave). En 2030 habrá 200 millones más en esa situación.
- 2000 millones de personas trabajan ocho horas al día en cuidados sin remuneración alguna. Tres cuartas partes son mujeres.
- En 2018, 606 millones de mujeres en edad laboral a nivel mundial, no percibieron salario porque estaban dedicadas al cuidado no remunerado.