La diferencia entre estar sanos y no estarlo, define nuestra calidad de vida, nuestro bienestar, y el de aquellos que nos rodean.
Escuchar la voz de las y los pacientes es fundamental para entender sus necesidades.
Un diagnóstico oportuno y acceso a terapias innovadoras tiene el potencial de cambiar el curso de las enfermedades o incluso curarlas. Le permite a los pacientes seguir cumpliendo sueños.