Las herramientas de propiedad intelectual (PI) como patentes, marcas registradas y diseños industriales, entre otras, sustentan el ecosistema global de innovación y el desarrollo social y económico. A su vez, juegan un papel fundamental para solucionar nuestros desafíos globales comunes y para traducir grandes ideas en impactos positivos que nos ayuden a alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
Durante una reunión sobre los ODS organizada en Portugal, Daren Tang, director general de la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI), señaló que en la actualidad, la PI proporciona un vehículo para que los medicamentos salven vidas y que nuevas tecnologías lleguen al mercado; ayuda a la investigación en las ciencias de la vida y sirve como medio para que los descubrimientos innovadores lleguen a los lugares donde más se necesitan.
La propiedad intelectual también protege a quienes asumen riesgos en áreas como la tecnología limpia y la tecnología verde. Para muestra, el Libro de Tecnología Verde editado por la OMPI en 2022, que presenta tendencias sobre cómo los ecosistemas de innovación están generando una gran cantidad de soluciones de tecnología verde, e incluye ejemplos para traducir la investigación básica en soluciones tangibles para combatir el impacto del cambio climático en la agricultura y la silvicultura, el sector del agua y las ciudades.
Para alcanzar las metas de los ODS todos tenemos que hacer nuestra parte. En la industria farmacéutica tenemos claro que la propiedad intelectual será un factor determinante para el desarrollo de soluciones de salud que lleguen a todas las personas.