Antes de la pandemia por covid-19, el tema de salud era poco atendido, sin embargo, la crisis sanitaria puso de manifiesto que situaciones como esta nos afectan a todos, en todos los aspectos.
“Del doble shock a la doble recuperación” es una serie de informes publicados por el Banco Mundial que ofrecen un análisis de las tendencias y perspectivas más recientes sobre el gasto público en salud. La primera entrega se publicó en el punto más álgido de la pandemia, con una revisión de las opciones para mantener o aumentar las inversiones durante las recesiones económicas.
Hace unos días se lanzó una actualización titulada “Financiamiento de la salud en tiempos de shocks globales: fuerte avance, retroceso temprano”, donde se analizan las tendencias del gasto público en salud durante los últimos tres años.
Les presentamos los hallazgos más importantes:
- El estudio mostró que el gasto real per cápita en salud se disparó durante los dos primeros años de la pandemia. En 2020, creció en promedio un 21%, y en 2021 se situó en un 25% por encima de los niveles de 2019.
- El gasto de los gobiernos en salud general aumentó un 6% desde 2019.
- En 2022, mientras los gobiernos luchaban contra la variante Omicron, la cual provocó otra ola de infecciones en todo el mundo, los sistemas de salud también le hicieron frente a la acumulación de servicios no relacionados con covid – 19, lo que se traduce en que las y los pacientes con enfermedades como cáncer o diabetes pudieron acceder a su tratamiento después de dos años.
Hoy, tenemos una responsabilidad para llevar al mundo a una nueva trayectoria de desarrollo sostenible a prueba de pandemias, en donde prioricemos a la salud.
Recordemos que destinar presupuesto a la salud no es un gasto, es una inversión.