Directora de finanzas
MSD México
¿En qué área STEM te especializaste?
Matemáticas/Finanzas
¿Por qué decidiste estudiar / profesionalizarte en esa área?
Me divertía memorizando números y estadísticas que escuchaba o veía en la televisión. Así que decidí formar una carrera en algo en lo que pudiera aprovechar mis habilidades y que me resultara divertido.
¿Cuál ha sido uno de los momentos más satisfactorios, a lo largo de tu carrera profesional, relacionado con la ciencia, la tecnología, las ingenierías y/o las matemáticas?
Trabajo en una empresa y en una industria en las que he recolectado muchas experiencias que me han hecho crecer y aprender. Entre éstas están los proyectos de transformación, fusión o venta de negocios en los que he coordinado equipos multidisciplinarios y que requirieron que trabajara con colegas de otras especialidades como ingenieros, químicos, abogados, especialistas en temas regulatorios, recursos humanos, etcétera. Haber liderado esos proyectos de forma exitosa, es una prueba de que mi trabajo puede tener un impacto más que numérico.
Con demasiada frecuencia, las mujeres y las niñas enfrentan adversidades que obstaculizan su educación, capacitación y entrada a la fuerza laboral STEM. ¿Cómo podemos contribuir a que esta situación cambie?
De forma colectiva, considero que las empresas y cámaras podrían generar alianzas y programas de apoyo enfocados en la educación y desarrollo profesional de niñas y jóvenes talentosas, por ejemplo, otorgando becas para atender necesidades de difícil acceso como estudiar un idioma, o bien, creando programas de formación y/o bolsas de trabajo que les permitan a las estudiantes incorporarse a la industria desde una etapa temprana. De forma individual, creo que muchas mujeres podrían actuar como mentoras compartiendo sus historias de éxito con las niñas y jóvenes.
¿Qué mensaje le darías a todas esas niñas y mujeres que quieren iniciarse en las STEM?
Les diría que confíen en sus capacidades de aprendizaje, y que hagan del conocimiento y la preparación sus mejores armas para enfrentar el mundo y mejorar su entorno; que no sólo depositen su confianza y expectativas en lo que saben, sino en lo que pueden aprender, y que nunca se intimiden por su género o condición social o económica, porque ninguna de esas cosas define o limita sus capacidades.